26 de septiembre se conmemora el Día Nacional para la Prevención del Embarazo no Planificado en adolescentes.
En la actualidad ante la emergencia sanitaria por COVID-19, los servicios de Salud Sexual y Reproductiva continúan operando en todo el país con el objetivo de redoblar esfuerzos en la prevención del embarazo no planificado en adolescentes, el cual podría llegar a 21 mil 575 embarazos en adolescentes, que se estima ocurran a nivel nacional como consecuencia del confinamiento por la pandemia, de acuerdo con proyecciones del Consejo Nacional de Población (CONAPO) [i].
“Bajo el marco del Día Nacional para la Prevención del Embarazo no Planificado en Adolescentes, que se conmemora este 26 de septiembre, es prioritario continuar con el fortalecimiento a nivel nacional del acceso a métodos anticonceptivos y servicios de consejería en materia de salud sexual y reproductiva en este grupo poblacional en todas las unidades de salud, como lo ha determinado el Gobierno Federal desde el inicio de la pandemia”, expresó la Maestra Gabriela Rodríguez Ramírez, Secretaría General del CONAPO.
De acuerdo con proyecciones del CONAPO, entre 2020 y 2021 el número total de adolescentes menores de 19 años con necesidades insatisfechas de anticoncepción (sin acceso a un método anticonceptivo) aumentará un 20% a consecuencia de la pandemia, ocasionando un aumento de 21 mil 575 embarazos no planificados en adolescentes, adicionales a lo previamente estimado.
En sintonía con los objetivos prioritarios de la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA) de reducir en 50% la tasa específica de fecundidad de las adolescentes y erradicar el embarazo en niñas de entre 10 y 14 años de edad para el 2030 [ii], la funcionaria destacó que todas las acciones enfocadas en prevenir el embarazo en adolescentes están encaminadas en ayudar a retrasar la edad de la maternidad y de la paternidad, así como disminuir las brechas de género al incidir en el aumento del nivel de escolaridad de las y los adolescentes, y sentar las bases para el acceso a mejores empleos con seguridad social y una vida saludable.
CONAPO tiene la responsabilidad como coordinador de las acciones de la ENAPEA 2020-2024, cuya segunda fase prioriza la territorialización de la estrategia para fortalecer la colaboración interinstitucional para lograr descender la tasa de embarazos en adolescentes y se erradique el índice de niñas embarazadas y niñas madre, ya que diariamente nacen mil niños de una mamá menor de 19 años, enfatizó la Mtra. Gabriela Rodríguez.
El inicio de la vida sexual a edades tempranas, la falta del uso regular de métodos anticonceptivos y las limitaciones en su acceso, incrementadas en tiempos de pandemia, colocan a los métodos anticonceptivos de acción prolongada (ARAP), como una estrategia conveniente para prevenir el embarazo no planificado en adolescentes, ya que además de ofrecer los índices más altos de protección, su eficacia no se ve afectada por errores en su uso, olvidos o abandono, destacó la Doctora Georgina Ruvalcaba, gineco-obstetra y gerente médico de Innovative Women´s Health Care de Bayer de México.
En México, la ENAPEA considera a los métodos ARAP como una alternativa conveniente para ayudar a las mujeres jóvenes a planificar su vida reproductiva, destacando que estos métodos “se encuentran entre las opciones de primera línea para las mujeres que estén por iniciar o hayan iniciado actividad sexual”.[iii]
Como muestra del compromiso de las autoridades sanitarias por fortalecer las estrategias para reducir los embarazos no planificados en los adolescentes, recientemente se integró al Compendio Nacional de Insumos para la Salud un nuevo implante anticonceptivo subdérmico que ofrece protección hasta por 5 años, el cual ya está disponible de manera gratuita en instituciones de salud pública como el IMSS y Secretaría de Salud, para beneficiar a un mayor número de mujeres jóvenes.
Por su parte, la doctora Josefina Lira Plasencia, presidenta del Colegio Mexicano de Especialistas en Ginecología y Obstetricia (COMEGO), destacó que el embarazo en adolescentes es ahora un problema de origen multifactorial que amplía las brechas sociales y de género entre la población, ya que altera el proyecto de vida de la adolescente embarazada y de su entorno familiar, y tiene importantes repercusiones negativas en su salud y su desarrollo psicosocial.
“Por esta razón los jóvenes tienen derecho a contar con información sobre salud sexual y reproductiva, así como a acceder a estos servicios de salud con el fin de que, si ya tienen una vida sexual activa, conozcan las opciones anticonceptivas disponibles de manera gratuita en las unidades de salud pública, como condones, píldoras anticonceptivas, inyecciones, dispositivo intrauterino o implante subdérmico.
Para promover un adecuado desarrollo de los y las adolescentes en su presente y futuro, es fundamental que desde esta etapa comiencen a tomar decisiones sobre su vida sexual y reproductiva, evitando así un embarazo no planificado, un aborto o complicaciones como la mortalidad materna, externó la gineco-obstetra.
Finalmente, las especialistas coincidieron en la necesidad de unir esfuerzos para colaborar y fortalecer las estrategias que contribuyan a reducir de manera efectiva este problema de salud pública que amenaza el desarrollo de nuestros jóvenes.
Bayer
de México ,www.bayer.com.mx
[i] Embarazo adolescente en México/ CONAPO/ GOB:MX/ Doctora Maricruz Muradás Troitiño, Directora General de Estudios Sociodemográficos y Prospectiva/ julio 2020.
[ii] ENAPEA, p. 17. Disponible en: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/232826/ENAPEA_0215.pdf.
[iii] ENAPEA, p. 17. Disponible en: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/232826/ENAPEA_0215.pdf